Cartagena estuvo a punto de registrar una tragedia este miércoles 4 de junio, cuando una lámina de eternit fue arrastrada por los fuertes vientos que azotaron distintos sectores de la ciudad y estuvo a centímetros de causar una desgracia.
El incidente se presentó mientras un hombre revisaba una falla en su vehículo, estacionado en plena vía pública. Según testigos, el ciudadano se encontraba agachado cuando, repentinamente, la lámina metálica cruzó a gran velocidad por encima de él, impactando con fuerza una pared cercana.
El hecho generó pánico entre los presentes, quienes no salían del asombro al ver cómo, por escasos segundos y centímetros, se evitó una posible decapitación.
Las autoridades hicieron un llamado urgente a la comunidad para asegurar techos, láminas y objetos sueltos durante la temporada de vientos intensos, con el fin de prevenir emergencias similares. Afortunadamente, en esta ocasión no se reportaron heridos, pero el riesgo fue evidente.